“Por norma general se suele señalar que un pelo muy graso debe de lavarse con una mayor frecuencia que un pelo seco”, recoge la revista CuidatePlus. Por otro lado, es habitual que los pelos rizos sean menos grasos, y que los llanos se ensucien con una continuidad considerablemente más elevada. Otros elementos que afectan a la proporción de grasa producida por el pelo son las mechas, los tintes o la utilización excesivo de plancha, rizador o secador, cuyo uso es conveniente moderar. Cada cual va a tener su opinión, pero si hay algo claro es que sostener el cabello fuerte y sano es para muchos, sobre todo los hombres frente su miedo a quedarse calvos, una auténtica prioridad. El pelo, al final de cuenta, es uno de los rasgos estéticos mucho más propios de un individuo, y en dependencia de de qué forma lo llevemos tenemos la posibilidad de parecer un individuo totalmente diferente.
Aplicar el champú, masajear el cuero cabelludo para beneficiar la circulación, y añadir poco a poco agua para combinar bien el producto mientras que se prosigue masajeando el cuero cabelludo. No tienes que volverte orate escogiendo un champú para tu pelo, salvo que seas un friki de los cuidados. El responsable de Frack Provost nos recomienda emplear “un champú con la capacidad de limpiar y remover todos y cada uno de los restos. Si, además de esto, evita que se absorba el polvo y además regula bastante el pH ácido de la piel, especialmente si eres deportista. Asimismo es bueno un champú regulador, si consideras que tu pH es más bien graso.
¿Qué Sucede Si Te Lavas Poco El Pelo?
Si tienes el pelo seco, puedes emplear un acondicionador cada dos o tres días eludiendo que caiga en la raíz. Si el pelo está bastante desecado, se puede usar una mascarilla. Se debería utilizar una vez a la semana y dejarla actuar cinco o diez minutos sin que llegue a tomar contacto con cuero cabelludo”. Los especialistas del Boston Medical Center fueron los que han negado el mito de que hay que lavarse el pelo a diario.
Quizás la opción mejor no sea ni uno ni lo otro, sino un punto intermedio. Según otros especialistas conviene limpiarse el pelo cada 3 días y durante 6 minutos. La cantidad del champú que se debe emplear es del tamaño de una avellana (o nuez, dependiendo de la largura del pelo), y se tiene que hacer con un champú neutro y acondicionador (o mascarilla, cada 2 semanas precisamente). El especialista también destaca a Maldita Ciencia que hay épocas del año o momentos de estrés en los que la secreción grasa aumenta y, por consiguiente, el pelo se ensucia mucho más. Lo idóneo es que evalúes tu género de cabello, el largo, la forma y la secreción grasa y tantees hasta localizar la frecuencia para lavarte el pelo que resulta mejor para ti. “Piensa en la textura que tiene”, afirma la periodista Lindsey Ellefson, en un reciente producto publicado en \’Life Pirata informático\’.
La Ciencia Ha Desvelado Que Lavarse El Pelo Todos Los Días Puede Ser Amenazante Para Nuestro Cuero Cabelludo
Desde Maldita.esaclaran esta discutida cuestión y remarcan que lavarse el pelo cada día no es amenazante ni va a perjudicar de forma negativa a la salud capilar. En armonía con lo recapitulado anteriormente, aclaran que la frecuencia perfecta para lavarse el pelo está en el tipo y el estado del mismo. Te adelantamos que todo va a depender de tu género de pelo (seco, graso, con tratamientos capilares) y de tu rutina habitual.
Como consecuencia de que el pelo decolorado tiene mayor inclinación a los daños, las roturas y la sequedad, requiere de un mayor cuidado para mantenerlo a raya. Este champú limpia y repara el pelo devolviéndole la luz y la fuerza. El dermatólogo Paradi Mirmiani enseña a Business Insider que la clave radica en que cada sujeto genera una cantidad diferente de sebo, sobre la que intervienen factores como las hormonas o la genética.
La consecuencia es que el cuero deba generar más aceites para compensar la escasez causada por la acción del agua ardiente. Lo destacado es recurrir al agua tibia y, aún mejor, acabar con un aclarado frío. Finalmente, pero no por ello menos importante, ten presente que lavar el pelo con mayor o menor continuidad no incrementa ni reduce la grasa del cuero cabelludo.
Por este motivo, es fundamental maximizar su precaución y reflexionar sobre los hábitos mucho más adecuados para sostenerlo bello. Hablamos de un champú que repara la fibra capilar, restaura los daños y refuerza la composición del cabello. Gracias a su fórmula sin colorantes, limpia el cabello en profundidad dejándolo sedoso y refulgente. Los cueros cabelludos mucho más sensibles y también irritables, los pelos dañados por decoloración y otros tratamientos o el cabello más quebradizo es el que tiene mayor riesgo de sufrir con una continuidad de lavado diaria o mayor a la media.
¿Deben Los Deportistas Lavarse El Pelo Con Mucho Más Continuidad?
Otras celebridades que asimismo se lavan el pelo una o dos veces a la semana son Demi Moore y Scarlett Johansson, quienes eligen que el pelo respire y no se reseque o irrite. ¿Sabías que Khloé como Kourtney Kardashian unicamente se lavan el cabello 1 vez por semana? Hasta ahora habíamos planeado que la frecuencia con la que lavábamos el pelo influía en que éste se ensuciara más o menos.
Mucho Más En Salud
“Utilizar champús y acondicionadores mucho más ligeros en el pelo liso es lo mejor, puesto que el cabello sin textura tiende a verse grasoso considerablemente más rápido que cualquier mujer que tenga el pelo rizado”, asegura Cho. “Por lo general, lavarse cada dos días basta para sostener el pelo saludable y brillante”. Se aconsejan fórmula enriquecida con extracto de algas, sal marina y aceite de coco para realzar el cuerpo y el brillo.
Lo que hará es normalizar la grasa a nivel de cuero cabelludo”. Las glándulas de la piel producen una substancia olegiaginosa llamada sebo, que es la encargada de que con el paso del tiempo nuestro cuero cabelludo se vuelva más refulgente, oscuro y graso. Estas glándulas están ubicadas en la dermis, al lado de las raíces del pelo, y a través del folículo piloso es como ese sebo sale de la piel y llega hasta el pelo. Se han escrito ríos de tinta sobre cuántas veces hay que lavarse el pelo y siempre y en todo momento han surgido teorías de todo tipo. En verdad, son muy recurrentes las sugerencias de llevarlo a cabo lo mínimo posible, porque, según dicen, de esta manera el cuero cabelludo producirá menos grasa y se ensuciará menos. Jenny Cho, estilista, afirma que es crucial seleccionar un champú y acondicionador libre de sulfato y libre de parabenos para evitar que tu color se vea perjudicado.